miércoles, 7 de septiembre de 2011

6 th September.| the beginning


4:30 de la mañana- Quedan todavía seis horas y media para que empiecen las clases, pero los nervios me pueden y no me dejan dormir. Me quedo en la cama pensando tres largas horas. ¿Cómo será todo? ¿Cómo será la gente? ¿Cómo se portará conmigo? ¿Las clases? ¿Profesores? ¿taquillas? ¿pasillos? ¿horarios? ¿clases? ¿comida? Una lista interminable de preguntas se acumulaban en mi cabeza, deseando una respuesta.
7:30 de la mañana- me dispongo a terminar de una vez el libro que debía leerme. Yo siempre dejando las cosas para el último momento!  Bueno, el caso es que ya está leído y releído.
8:30- Me pongo nerviosa, cada vez más. Las preguntas aumentan y el tiempo pasa, cada vez queda menos. Busco distracción, me meto en la ducha con la música a tope, pero no funciona. Me visto, me preparo, me peino, me cambio de ropa y me vuelvo a cambiar, pero tampoco ayuda. Juro y perjuro que no había estado tan nerviosa en mi vida.
9:30- Nerviosismo total 2. Llamo a mis padres pero no contestan. La ansiedad aumenta. Me sentía sola. Necesitaba escuchar un “todo va a salir bien” o un “si estás ahí es porque te lo mereces”. Pero lo único que escuchaba eran las malditas preguntas que se encontraban todavía en mi cabeza necesitando salir. Les mando un correo, tampoco contestan. Abro el skype, allí están. Les veo las caras y empiezo a llorar. Llevo aquí un mes, quedan 9. Y les echo tanto de menos ahora que no se cómo será el resto del año. Hubiera dado cualquier cosa en ese momento por un gran abrazo en familia, Acu incluido. Intentan calmarme, pero sigo nerviosa. Dicen todo lo que necesito oír, todo va a salir bien. Ellos siempre tienen razón.
10:15- Cocina de la casa. Los pensamientos vuelven, me cruzo con Paige. Ve mis ojos, llorosos, y viene a junto de mí y me abraza: “Everything’s going to be allright honney, don’t cry”. La verdad es que no sabéis la suerte que he tenido con esta familia. Aunque sean raros a conciencia y no me den de comer más que pienso y verduras totalmente orgánicas, debo decir que les quiero un montón.
10:30- llegamos a hablar con el Counselor, que es como el coordinador que lleva el tema de mis asignaturas y mi horario. He tenido problemas con las asignaturas. Mi colegio no ofrece Biología en mi curso, ni química, pero yo las necesito. Pero al final conseguí entrar en las clases (aunque sigo teniendo problemas, ya os contaré más adelante).
11:00- Tour rápido por todo el high school intentando localizar todo. Todo parece estar en orden.
11:30- llegada a mi Home Room, que viene siendo como el aula de tutoría. Cada mañana, nos sentamos allí durante 15 minutos y escuchamos los anuncios de megafonía, revisamos cualquier problema, etc. Nos estuvo explicando un poco el profesor y así, y es super majo.
Debía estar allí sentada 45 minutos, pero cuál fue mi sorpresa al encontrar a Paige en la puerta de mi clase para ayudarme a encontrar todas y cada una de mis clases. No sabéis cuánto me ayudó, la suerte que tengo de tenerla a ella.
Volví a la home room, y me senté 10 minutos, y luego nos fuimos a hacer las fotos de principio de curso para el anuario. No me preguntéis, porque no he visto la foto… a saber jajajajajajaja
Luego nos fuimos al auditorio, que viene siendo el paraninfo de toda la vida. Y nos soltaron el típico rollo Director de todos los años, que sea EEUU, China o España, es siempre el mismo.
Tras ese tostón en el que casi me duermo, nos dieron tiempo libre, y nos fuimos a la Cafetería porque repartían helado gratis (por ser el primer día, qué majos olle). Pronto llegaron las 14:30, las clases habían terminado sin darme cuenta. Las cosas nunca son tan terribles como te las imaginas.
Tras las clases me despedí de Paige y sus friends, que se marcharon a casa en bus (sí, amarillo).
Yo en cambio, me fui a entrenar. Fue duro, porque al día siguiente teníamos partido y había que prepararse, pero divertido de todas maneras.
Terminamos y llovía a cántaros. Y una gran tarde de compra de material escolar nos esperaba. Compramos de todo cuanto había en la tienda, arrasamos jajajaja. Llegamos a casa y me tiré en la cama. El día siguiente sería más duro todavía. Pero el mal trago ya había pasado. Ahora estoy segura de que todo iba a salir bien. Solo tengo que pensar que puedo. Porque sí, puedo.

1 comentario: